(English intro to Spanish lang post) PNAS and Science papers about the origin of social monogamy in primates/mammals differ in some conclusions (protecting offspring from infanticide vs incapacity of controlling females over large territories). But they agree in an important one: the so established hypothesis of parental care as the main cause of monogamy is in fact a secondary adaptation (in mammals at least, maybe still fundamental in birds). That’s data against a common thought, and it is newsworthy. It should probably have been more emphasized in the stories we’ve tracked from the Spanish speaking press. Other inaccuracies we’ve read are: talking explicitly about humans with no further reporting than PNAS and Science papers, using the term “fidelity” instead of “monogamy” without making the important distinction versus social and sexual monogamy, and writing the two stories separately instead of combining the information from the two papers. This last problem happened because the most important news agency in Spanish language (EFE) distributed a story talking only about the PNAS-infanticide paper. The best two stories we found are in El Mundo (Spain) and Folha (Brazil).
Esta semana las revistas PNAS y Science publicaron dos trabajos amplísimos sobre el origen evolutivo de la monogamia social (animales que forman parejas estables). PNAS iba a salir primero, y Science decidió adelantar el embargo para que ambas informaciones pudieran ser tratadas en las mismas notas.
Siendo muy esquemático, el de Science se analizó la evolución en los últimos millones de años de las estrategias reproductivas de 2545 especies de mamíferos, y vio que cuando los grupos iban ocupando más espacio y las hembras se alejaban entre sí, había tendencia a pasar de promiscuidad a monogamia. La interpretación es que en estas condiciones los machos no podían controlar que otros individuos no fecundaran a sus hembras, y se desarrolló la monogamia para tener la descendencia garantizada.
El de PNAS se realizó con 230 especies de primates, y vio que la monogamia solía desarrollarse en especies donde el infanticidio era frecuente (macho que asesina los hijos de su nueva hembra para que esté en celo más pronto). En este caso la monogamia social fue una adaptación para que los machos protegieran su descendencia.
Hay obvias discrepancias entre ambos estudios, pero una coincidencia muy interesante que no se ha explotado suficiente en las historias leídas: el cuidado parental de las crías (explicación a la monogamia vigente hasta el momento) fue una adaptación secundaria, no la fuerza evolutiva desencadenante de la monogamia. Romper una teoría establecida es de lo más noticioso en ciencia, y deberíamos haber insistido más en nuestras notas. El cuidado parental puede continuar explicando la monogamia en aves, ya no en mamíferos y primates. Quien sabe en humanos.
Este último punto es importante: a pesar de que muchas notas periodísticas extrapolan directamente a los humanos, los investigadores de ambos estudios los dejan al margen (especialmente el de Science-mamíferos). Para hablar de humanos lo interesante hubiera sido incorporar las declas de algún paleoantropólogo experto o estudioso de la evolución humana (los hay muchos y con grandes ganas de comunicar) para que diera su visión sobre los estudios. Nadie lo ha hecho.
El otro punto negativo de algunas notas es confundir monogamia con fidelidad. En el mismo título de ambos artículos de science y pnas se habla de “social monogamy”. La monogamia social es formar parejas estables (algo relativamente frecuente en la naturaleza), pero que estas parejas sean monógamas sexuales (fieles) y no haya escarceos, eso es extrañísimo. Y hay infinidad de observaciones y evidencias empíricas sobre ello. (ADN de polluelos en especies monógamas por ejemplo)
El otro detalle periodístico es que, para hacer realmente bien el trabajo, las notas deberían haber hablado de los dos trabajos a la vez, no tratarlos por separado. Cierto que la liberación del embargo de Science fue el mismo lunes, pero tiempo había de sobra. Por ejemplo Teresa Guerrero “mamíferos monogamos para conservar a la pareja y evitar el infanticidio” en El Mundo publicó una de las mejores notas sobre el tema inmediatamente tras liberarse el embargo (3:02pm EDT), y explicando perfectamente la metodología y conclusiones de ambos estudios. El titular es un poco engañoso pues lo del infanticidio sólo aplica a primates, pero el contenido está muy bien trabajado, y no necesita hacer referencias a los humanos.
Por su parte, extrañamente El País “La fidelidad del macho es fruto evolutivo para evitar los infanticidios” sólo habla del estudio de PNAS, y habla incorrectamente de fidelidad en el titular. Tampoco es que sea tan importante, y el texto está muy bien, pero es un matiz relevante en etología animal como para hablar con propiedad.
Luego vemos textos como los de Cecilia Roca “¿Por qué el hombre evolucionó hacia la monogamia?” En ABC, que vinculan directamente ambos estudios con los humanos. Es lógico hacerlo, al fin y al cabo también somos primates, pero el estudio de mamíferos hablando de espacios amplios no sabemos si aplica directamente en humanos, y lo del infanticidio es un vestigio muy pero que muy antiguo de nuestra especie. De hecho desde que nació la cultura aplicaría más la primera opción (no tanto por estar alejados sino escondidos) que la segunda. Pero no dejan de ser especulaciones. Para ser justos, el texto de Cecilia es riguroso y no extrapola a humanos, y el titular bien podría ser obra de los editores.
Muchísimos medios han utilizado la información de EFE, que sólo utiliza el artículo de PNAS a pesar de publicar su nota el martes cuando el de Science ya llevaba tiempo por todos sitios. Efe es la agencia más utilizada, y debería mejorar su cobertura de ciencia. Si escribimos “monogamia” en google news aparecen decenas de titulares diciendo que los hombres somos monógamos para evitar el infanticidio (y es falso). Los medios que utilizan la info de AP sobre “las causas de la monogamia animal” (especialmente en América Latina) sí juntan ambas explicaciones en una información más completa, y no tan vinculada a humanos (quizás esto último le resta fuerza, pero le suma rigor).
De América Latina, mencionar el muy buen texto y excelente gráfico sobre ranking de monogamia (foto este artículo) de Rafael García “Biólogos rivais disputam explicação da monogamia” en el brasileño Folha.
Y poco más. Salvo el de Rafael en Folha y Teresa en el Mundo, no hemos visto ningún otro esfuerzo relevante en medio importante de habla hispana en digerir bien la información. Cierto que a primera lectura puede parecer un tema frívolo, pero a diferencia de otras historias sobre evolución y comportamiento esta está apoyada en datos muy sólidos. Además hay el elemento de que son dos papers con ciertas discrepancias, lo cual le añade un elemento para jugar con las notas. Creemos que sí merece más atención, e incluso una visión crítica a la debilidad de la ciencia a tratar estos temas. Desbancan la hipótesis del cuidado parental con dos que son muy diferentes, genrando al final quizás más confusión sobre el origen de la monogamia social.
– Pere Estupinyà
Leave a Reply