(English intro to Spanish lang post) Several interesting stories in Latin America this week. First, an Inter-American Development Bank study says that Latin America faces costs of around $100 billion by 2050 from diminishing agricultural yields, disappearing glaciers, flooding, droughts and other effects of climate change. Initial stories by such news services as AFP and EFE lean toward primary advice that countries in L. Am. should invest in reducing their emissions to ease the effects of global warming. Fortunately other news corrected this nonsense by saying that the region’s first priority is to invest in adaptation, not mitigation. A reporter from BBC Mundo writes a very good story in which she interviews the responsible authors of the IADB study. English-language IDB Web Summary, IDB Report.
In Colombia, a team of journalists accompanied glaciologists and researchers to Colombian glaciers. They published three consecutive stories in El Espectador documenting the work of the scientists and the glaciers’ dramatic melting. In Costa Rica, La Nación conducted a large survey concluding that half of ticos would agree to pay more taxes for environmental protection. In Chile, two cool stories in La Tercera: one about a prototype space probe by local engineers that could ollect data efficiently on the Moon. The other report explains technological improvements in soccer that can make phantom goals easier to detect, would distinguish when a player is faking a blow from an opposing player’s fault, and other supposed improvements. In Mexico science reporters at El Universal wrote an extremely well documented and illustrated online graphic story about bioremediation. And Finally, in Argentina La Nación starts a dramatic story by recalling that three decades ago an Argentine chemist received the Nobel Prize for a new way to synthesize antibodies. The story then regrets that only in other countries was it used create cancer drugs, with Argentina’s industry left out. Against this background it then gets to the news – 30 years later a new, local pharma company is using it to produce drugs.
El martes aparecieron en algunos medios notas de la agencia AFP desde Washington diciendo que “América Latina perdería $100.000 millones por cambio climático”. Era sobre un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en preparación a la conferencia Rio+20. Este tracker se sulfuró al leer repetidamente frases como “América Latina debería gastar 110 000 millones de dólares al año de aquí a 2050 para reducir la emisión de carbono, si no quiere perder una suma equivalente cuando llegue esa fecha, a causa del impacto del cambio climático”. ¿Reducir las emisiones? ¿estamos tontos o qué? Las emisiones las deben reducir otros. China, Europa, y sobre todo EEUU. ¿Le vas a pedir a Nicaragua que emita menos CO2? Te envían a la xxxxx. Quizás México y Brasil deben contemplar algo de mitigación. Pero el resto de países invertir en adaptación frente a los daños de un cambio climático causado por otros, y que a este paso no van a evitar. El tracker buscó la nota de prensa del BID, y –aunque un poco confusa- vio que sí se centraba en adaptación. Era un claro caso de mala interpretación de la agencia de noticias, y de medios que copian y pegan sin pararse a leer y pensar un mínimo. El mismo error cometió EFE. Decidimos esperar un poco a ver cómo se trabajaban las notas, y si bien no ha tenido gran repercusión, felicitar a BBC Mundo por el excelente trabajo de Alejandra Martins “El cambio climático le costará a América Latina $100.000 millones al año”. Allí sí recoge bien el mensaje de la adaptación, y además entrevista al responsable del estudio del BID, Walter Vergara. Muy recomendable lectura. Se habla de arrecifes coralinos, humedales, cuenca amazónica, y glaciares andinos. Y Vergara reconoce que no sabe de dónde saldrá el dinero para trabajar tan enérgicamente en adaptación.
Precisamente sobre glaciares versaron esta semana tres notas en El Espectador, por Mauricio “Pato” Salcedo “Colombia ha perdido 13 glaciares”, “Sed de alta montaña” y “Glaciares Colombianos” (M.P. Salcedo). Tres crónicas de un equipo periodístico que sube a los glaciares acompañado de investigadores para documentar su deshielo. Buen trabajo.
También nos ha gustado mucho la nota en La Tercera de Axel Christiansen “Equipo chileno presenta a Google robot para llegar a la Luna en 2014”, describiendo el instrumento que compite para el Google X Prize, con el que se podría enviar un robot a tomar datos en la superficie lunar. Buenísimo también el reportaje de dos páginas en el suplemento Tendencias “La ciencia que revolucionará la forma en que se juega y se ve el fútbol” (página 2). Según el artículo, habrá láseres que marquen la distancia de las barreras, y balones con sensores que evitarán goles fantasma y dirán cuando la pelota ha salido por la línea de banda o no. Pero además habrá detectores de insultos, y espinilleras con sensores para averiguar si a un jugador realmente le han hecho penalti o se ha tirado a la piscina. Buf!.
En México, El Universal nos ofrece de nuevo un gran documento gráfico, esta vez sobre biolimpieza, por Guillermo Cárdenas. Alucinante el grado de detalle en algunos apartados, explicando los diferentes tipos de organismos y manera de biodegradar contaminantes.
Sin abandonar el medioambiente, La Nación (Costa Rica) impulsó una encuesta según la cual, y explicado por Michelle Soto, los ticos pagarían gustosos más impuestos para cuidar el medioambiente. Buena iniciativa de la Nación, y reportaje de Michelle.
Y muy buena nota en La Nación (Argentina) de Nora Bar “Se harán en el país fármacos contra el cáncer” que empieza explicando una realidad que no muchos investigadores de ciencia básica quieren ver: El argentino César Milstein ganó el premio Nobel en 1984 por descubrir una manera de producir anticuerpos, que al renunciar él a beneficios materiales, fue utilizada por empresas internacionales para producir fármacos contra el cáncer. Muy bien para la sociedad en su conjunto. Pero a un país no le sirve suficiente hacer ciencia básica si luego son empresas de fuera las que explotan el potencial económico. La nota de Nora en realidad va de que tres décadas más tarde, una empresa argentina empezará a producir estos fármacos. La pieza profundiza en gran detalle en el proceso de fabricación y las tecnología utilizadas.
– Pere Estupinyà
Leave a Reply